La promoción 2021 de electricistas está conformada por 40 mujeres de la zona oriental del país e igual número de la región central, así como 44 provenientes del occidente salvadoreño.
AES El Salvador a través de su programa AES Mujer, y Ciudad Mujer, del Ministerio de Desarrollo Local graduaron a 124 mujeres del curso de “Instalaciones Eléctricas Residenciales”. Del total de las graduadas, 118 obtuvieron su acreditación como Técnicas Electricistas de Cuarta Categoría ante la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (SIGET), lo que les permitirá ganar espacios laborales o emprender sus propios negocios en el rubro eléctrico.
El objetivo del programa es dar a las participantes los conocimientos y herramientas para la instalación confiable, segura y eficiente de un sistema eléctrico residencial, ayudándoles así a emprender en este oficio y obtener ingresos para su desarrollo.
Al respecto, el Presidente Ejecutivo de AES El Salvador, Abraham Bichara, expresó que esta iniciativa permite a las beneficiadas contribuir con la economía familiar y fortalecer su desarrollo profesional mediante un trabajo digno. “En AES El Salvador creemos firmemente en el potencial de la mujer, por eso estamos convencidos de que, al crear oportunidades para su desarrollo económico bajo condiciones equitativas, ellas podrán brillar en cualquier ámbito laboral” agregó Bichara.
El taller fue impartido en las tres regiones del país por la Escuela Especializada en Ingeniería (ITCA-FEPADE), implementando todas las medidas de bioseguridad para la prevención del COVID-19.
Durante el 2022, AES El Salvador junto con Ciudad Mujer y la SIGET continuarán apoyando a más salvadoreñas para seguir transformando al sector eléctrico salvadoreño y acelerando el futuro de la energía en el país.
AES Mujer: seis años impulsando el desarrollo económico de la mujer salvadoreña
Durante seis años, más de 500 mujeres graduadas y certificadas en los 27 cursos de instalaciones eléctricas residenciales desarrollados por AES, han sido protagonistas de sus propias historias de éxito y desarrollo, obteniendo empleos dignos o volviéndose proveedoras independientes de servicios eléctricos en sus comunidades.
Muchas de las mujeres graduadas en años anteriores han prosperado en el campo de la electricidad, rompiendo así paradigmas a través de su empoderamiento profesional. Sin embargo, todavía quedan brechas de género que necesitan cerrarse para alcanzar más oportunidades equitativas en este campo
