El Gobierno del Presidente Nayib Bukele mantiene el objetivo de combatir y erradicar a las pandillas, terroristas que por décadas mantuvieron amenazada a la población salvadoreña. Los esfuerzos y estrategias de esta administración están orientados no solo en la represión del delito, sino también en la prevención.
Parte de la estrategia de seguridad es el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), ubicado en Tecoluca, San Vicente, el cual ya recibió a los primeros dos mil pandilleros, que fueron trasladados desde el Centro Penitenciario de Izalco, en Sonsonate.
“El CECOT es el más grande y seguro del continente. Tiene toda la capacidad para recibir a los pandilleros de mayor peligrosidad”, dijo el ministro de la Defensa Nacional, René Merino Monroy.
El funcionario destacó que la capacidad de esta prisión es para 40,000 privados de libertad y con posibilidad de construcción de más módulos; explicó que quienes permanecerán en este lugar son pandilleros con jerarquía y no tendrán oportunidad de salir en ningún momento, ya que las instalaciones incluyen salas de audiencias para efectuar las diligencias judiciales a distancia.
“Los pandilleros que tenían jerarquía y a quienes se les ha comprobado que han cometido asesinatos son los que estarán en el Centro de Confinamiento del Terrorismo”, destacó el ministro de la Defensa Nacional.
El ministro Merino mencionó que como institución forman parte de la seguridad del CECOT. “Somos los responsables de los anillos exteriores de seguridad”, afirmó.
El CECOT cuenta con torres de vigilancia, muros de 11 metros de altura, sensor térmico, video vigilancia y mallas con descarga de 15,000 voltios y no se permiten visitas de familiares.
El viernes 24 de febrero dio inicio el traslado de los pandilleros y ranfleros a las instalaciones del CECOT, el Presidente Bukele informó de la movilización de los primeros 2,000 reos. El mandatario enfatizó que, desde ese día, esa será la casa de los terroristas y que pagarán por cada delito cometido.