El Gobierno del Presidente Nayib Bukele continúa combatiendo frontalmente la corrupción y la impunidad en el país, venga de donde venga, para llevar ante la justicia salvadoreña y que paguen por sus faltas todas aquellas personas que cometan un delito.
El mandatario destacó las resoluciones giradas en casos de corrupción en los que se han visto vinculados exfuncionarios, como el exalcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, quien fue capturado por el delito de apropiación indebida de retenciones o percepciones tributarias en perjuicio de la hacienda pública. También es procesado por fraude electoral y agrupaciones ilícitas.
El gobernante cuestionó que el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, haya tomado la decisión de contratar a Muyshondt como asesor del organismo, pese a conocer las acusaciones existentes en su contra y a ser una instancia que promueve la justicia, y que abandera la lucha contra la impunidad.
“Ayer, un día antes de la audiencia en donde iba a ventilarse todo esto, anuncia que iba a contratar a un criminal a todas luces. El mismo secretario general intentó darle inmunidad a un criminal salvadoreño”, declaró respecto al anuncio hecho ayer por el secretario Almagro.
El jefe de Estado anunció que el Gobierno romperá el convenio con la Comisión Internacional contra la Impunidad (CICIES) de la OEA, ya que es un “despropósito” que el país esté trabajando por combatir la impunidad con quienes están promoviéndola: “cometimos el error de confiar en la OEA, porque cómo pudimos haber confiado en gente que le da impunidad a criminales”, añadió.
En tanto, resaltó la condena de 10 años de prisión contra la exprimera Dama de la República, Ana Ligia de Saca, por el delito de lavado de dinero, bajo la administración de su esposo, el expresidente Antonio Saca. Además, deberá devolver $17.6 millones en concepto de responsabilidad civil.
