Los esfuerzos en materia de seguridad continúan en las zonas que por años estuvieron controladas por pandillas y otros grupos dedicados al tráfico de drogas.
En los accesos a la comunidad La Granjita, en San Salvador, se mantienen instalados controles vehiculares en cumplimiento al Cerco de Seguridad, para evitar ilícitos como el tráfico de drogas u otro tipo de delitos.
La presencia de elementos policiales y militares, permite que distribuidores de diferentes productos entren a esta zona con total tranquilidad.
Además, el Cerco Tutunichapa sigue en su curso y eso permite que, donde por años era zona de pandillas y venta drogas, ahora se ha convertido en un lugar de sano esparcimiento. Niños y jóvenes juegan con sus pelotas y bicicletas. Algunas familias salen a las aceras y conviven en un ambiente seguro.
En los accesos a la comunidad, soldados y militares realizan registros para evitar ilícitos.
Estas acciones de desarrollan en cumplimiento a la Fase #5 del Plan Control Territorial.