Cómo el Mar Menor pasó de ser un paradisíaco destino en el Mediterráneo a una laguna de aguas verdes

Agencias–El Mar Menor es una de las mayores lagunas litorales del Mediterráneo y ocupa unas 13.500 hectáreas de la costa de la Región de Murcia, en España.

Hasta hace apenas un lustro se caracterizaba por unas aguas hipersalinas y cristalinas que lo diferenciaban de otras muchas lagunas litorales europeas de aguas turbias y salobres.

Esa transparencia era fruto de unas aguas oligotróficas (escasez de nutrientes) y permitía la existencia de una laguna controlada por el fitobentos (las comunidades de plantas ancladas en el sedimento lagunar) al llegar la luz al fondo sin problemas.

Antes de la crisis actual, el Mar Menor había sufrido la presión de la minería de metales, con vertidos masivos al principio y drenaje de las estructuras mineras residuales después, y la de la actividad urbanística y sus infraestructuras turísticas asociadas (urbanizaciones, playas artificiales y puertos deportivos).

Estos factores alteraron la laguna, pero su funcionamiento básico no cambió sustancialmente.